Siendo como pinta el panorama económico a nivel mundial y local. Esta navidad no va a ser tan feliz o tan abundante como otras. Si antes la carencia social era a penas sostenible esta navidad y posiblemente las futuras sean mas crudas para los sectores marginados. ¿Pero que digo? Los sectores marginados somos la mayoría del pueblo. Los sectores impactados si, pero que poseen las herramientas para mitigar el efecto son la minoría. Son aquellos que esta navidad cenaran salmón, caviar, champagne entre muchas otras delicias que un obrero con el sueldo mínimo muy difícilmente podrá degustar. Pero la navidad es armonía, paz y ¿compras? Si es así esta vez santa estará amolado porque ni los aguinaldos harán una diferencia en las compras. La gente ya esta curándose en salud y el ahorro se ha hecho evidente. Pocos juguetes, pocos regalos, poco gastar, poco de todo. Ah! Pero eso si. Amor y calor humano sobran. Y debe porque el frió tampoco ha dado cuartel. Las madrugadas son tolerables solo para Sasquatchs o para borrachos por cuyas venas fluye templado licor.
Sin embargo y a pesar de casi cualquier adversidad queda viva la llama de la esperanza. Y ojala esa llama sea capaz de mantener, por breve que sea, un ambiente de tranquilidad, concordia y alegría en todos los hogares este 24 de Diciembre ya sea en México o el mundo. Lo que venga después, ya es otro cuento.
Feliz Navidad les desea su despreciable vecino.
Darth Cheese
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